Abstract:
La planta del pie y los tendones poseen una sensibilidad muy elevada y numerosos receptores sensitivos conectados con el resto del cuerpo a través del sistema nervioso. Cuando estos receptores reciben la información de que el apoyo de la planta del pie no es la correcta, o que hay algún sistema que está alterando su mecánica, o que el sistema propio y exteroceptivo no funciona bien, envían otra información a los segmentos corporales de que hay que buscar un sistema de compensación modificando y regulando la postura.