Abstract:
Según Errasti-Ibarrondo, et al. ( 2012), “la enfermería es una profesión que ha sufrido del
estereotipo público durante mucho tiempo, estando sujeta a ser vista como una profesión
predominantemente femenina, bajo el mandato médico y sin un campo competencial propio”
(p. 269).
Tras la profesionalización de la enfermería, se desarrollaron teorías y modelos que
sustentan y guían la praxis de los profesionales enfermeros, enriqueciendo su campo de
conocimientos. Es así que en la actualidad el profesional de enfermería es un ente clave en el
equipo de salud, liderando funciones tales como, la administración y gerencia hospitalaria,
docencia e investigación y por supuesto las aéreas de salud en el cuidado directo.
La imagen de la enfermería es un tema que ha sido objeto de varias investigaciones, siendo
un fenómeno social de gran trascendencia para el reconocimiento y desarrollo de la profesión
en la sociedad.
La presente investigación cuenta con la participación de 332 individuos, de los cuales 51 de
ellos son médicos docentes, y 281 son estudiantes de la carrera de medicina de la Pontifica
Universidad Católica del Ecuador (PUCE) durante el periodo enero a julio del 2016.
En el desarrollo de este trabajo se analizaron varios aspectos sobre la imagen de la
profesión de enfermera en el contexto actual, tales como: percepción sobre competencias y
funciones, independencia de la profesión, relaciones laborales, reconocimiento del profesional de enfermería, nivel de formación superior, atributos del enfermero y genero asociado a la profesión.
Para la recopilación de información del estudio se aplicó una encuesta online de opción múltiple, desarrollada por el autor para conocer la percepción de los dos grupos encuestados sobre la profesión y el profesional de enfermería a través de preguntas cerradas con escala de Likert.
La población objeto de estudio presentó un gran desconocimiento de la profesión enfermera respecto a sus competencias, considerándola una profesional con poca tolerancia y una tendencia en mantener estereotipos tan marcados como la feminidad vinculada a la profesión y la visión de una profesión dependiente del médico sin un campo competencial propio.
En este sentido se vislumbra la necesidad de fortalecer la imagen de la enfermería a una sociedad cada vez más consciente del rol que desempeña este profesional en nuestro entorno, y con ello el consecuente reconocimiento de este arte del cuidado
